martes, 18 de agosto de 2009

First blood.

Vagando iba por la universidad haciendo hora para mi clase de las 2 PM: Historia del cine.
Fui a la casa de un amigo que no vive muy lejos, él no tiene clases hasta la tarde, así que decidí pasar el rato con ese.
Se me hizo un poco tarde y llegué 7 minutos después de la hora de inicio, no me importó mucho ya que es la primera clase, de hecho, el profesor recién acababa de tomar lista. Solo tuve que decir mi nombre. Sin embargo eso no previno de que me entere de una noticia poco agradable.

Parece que al profesor no le bastó con saber nuestros nombres y nos hizo presentarnos uno por uno. Debíamos seguir sus indicaciones: el típico nombre, edad, qué quieres hacer por la vida, etc, etc. No tardé en notar que muchos han cambiado de carrera para este ciclo, debe ser porque es nueva.
En fin, la cosa no acaba allí. Casi por el final, como yo, estaba un chico y, como las indicaciones decían, dijo su nombre, pese a que todos (menos yo por tardón) lo sabían.
¿Su nombre?
Por favor, mi organismo ya reconoce ese nombre como "indeseable" para mi salud. Pero no me alarmé... salvo hasta que mencíonó eso de "me gusta dibujar desde muy pequeño". Y... eso de "estudié animación 3d después de terminar el colegio".

Agh, pensé. ¡La universidad es muy pequeña! Así que ahora tengo un motivo más.

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